Cuando Catalina alzó la mirada después de leer el mensaje, se encontró con los ojos de todos con un gesto que preguntaba quién le escribía. Ella con toda la tranquilidad y soltando un suspiro dijo: mi jefe mandándome cosas para la reunión de mañana. Intenso, yo sé.
La noche avanzó entre algunos tragos, entradas, platos fuertes, uno que otro postre, risas, conversaciones del más y del menos y otras que combinadas con el alcohol toman cursos insospechados tipo:
Mariana: Oigan, ¿y qué dicen si nos vamos para la finca este fin de semana?
Angela: ¿De verdad? Ayer le pregunté que si quería ir y me dijo que no, pero pues de una!
Mariana: Yo sé, pero creo me hizo bien venir esta noche. Mauro, gracias por insistir. Necesitaba esto. He pasado unos meses de mierda y aunque no quiero volver a saber en mi vida de hombres, creo que debo hacer algo para salir de este hoyo.
Angela: Ahora piensa eso Mariana. No se presione, usted está muy joven y todavía tiene un montón de tiempo para hacer mil cosas y conocer gente. Todo vendrá cuando tenga que ser. Estamos felices de que esté acá Mari. Usted sabe que yo la amo y sé que han sido meses difíciles pero esto va a pasar.
Mariana: ¡Pfff! Gracias hermana. Yo no sé qué haría sin usted en mi vida. ¿Ustedes si han visto que Angela es una super mujer? Mauro, tu sabes que tienes al lado una hembrota, no? Si le llegas a hacer algo, te mato.
Mauricio: jajaja Mi Mari, tu sabes que yo adoro a tu hermana y si, claro que sé que es una mujerzota. Si no fuera por ella este sitio no existiría y yo quién sabe en dónde andaría…
Daniel: ¡Ay mk! ¡No vaya a llorar ahora! Les dio la sentimental, ¡pues! ¿En serio? ¿Nos vamos a poner en ese plan? Me gusta más el de la finca. ¿Estamos incluidos nosotros?
Mariana: ¡Pero claro! ¡Nos vamos todos! ¡Yeiiiiii!
Daniel: ¡Esa es la actitud! Mi amor, (a Catalina) ¿por qué tan calladita? ¿No quieres ir a la finca?
Catalina: ¿Ah? Si, claro. Deli. Rico. Vamos. No quiero ser aguafiestas pero Dan, ¿nos vamos? Mañana tengo que madrugar.
Daniel: ¡Como ordenes mi princesa!
Mientras se despedían, Angela se le acercò al oido a Catalina, le apretó la mano y le dijo: Cats, tenemos que hablar, te llamo. Catalina asintió y le dijo: Claro, de una.
Cuando llegaron a la casa, Daniel agarró a Catalina por detrás, le pegó una palmada en las nalgas y la empezó a acariciar. Ella se alejó, se quitó los zapatos y se volteó a mirarlo a los ojos y le dijo:
Catalina: ¡Qué pereza tu borracho!
Daniel: Mmmmm… Pero no estoy borracho, me tomé tres tragos.
Catalina: Y tres copas de vino y un digestivo y hasta le cogiste el vaso a Mariana.
Daniel: ¡No seas exagerada! ¡Me equivoqué y ya! ¡Qué lío, pues!
Catalina: Si, si Daniel. Lo mismo de siempre. Soy una exagerada. Hasta cuándo con este temita, ¿ah? Además Mariana estaba borracha, no me parece que tome si está tan deprimida, no deberían acolitarle la borrachera.
Daniel: Mariana es una niña consentida. Le va a caer bien estar acá con su familia y la tristeza se le va a pasar. Si se toma unos tragos una noche no es el fin del mundo. No seas tan neurótica.
Catalina: ¿Neurótica? ¿Pero tu si sabes lo que le pasó?
Daniel: Pues que se separó. No es la primera ni la última. Las parejas se separan, no es que se va a morir por eso.
Catalina: ¿Pero sabes por qué?
Daniel: Si. Mauricio me contó una historia toda reforzada. Que se había enredado con un tipo con el que ni siquiera se vio en persona. Jajajajaja ¡Qué video tan raro!
Catalina: Pues están muy preocupados por ella. Está muy mal.
Daniel: Eso debe ser un capricho pendejo, obvio se le va a pasar. No te sorprenda que vuelva con el esposo.
Catalina: No sé. Angela me dijo que tenía que hablar conmigo.
Daniel: ¡Eso! A fomentar el chisme. Angela es una dramática.
Catalina: Si, como yo. A ti te salen solo críticas para los demás sobre todo cuando estás borracho.
Daniel: ¡Ay Chao Catalina! Cada vez que tienes reuniones con el viejo loco de tu jefe te pones insufrible.
Catalina se sentó en el sofá de la sala, esperó a que Daniel subiera las escaleras, cogió el celular y escribió:
(Mensaje para Andrés)
Está bien. Vamos a almorzar. ¿Te queda bien pasado mañana? Un abrazo.