Julio: Hola Alejita querida, ¿cómo estás? Qué vaina tan harta todo esto. ¿Cómo te has sentido?

Alejandra: Pues te podrás imaginar que no ha sido nada fácil. Jamás pensé que una cosa de éstas pudiera descomponerle a uno la vida de semejante manera.

Julio: No, es que claro que lo sé; pero si hace poco me tocó a mí con ese chisme que salió en todas partes y

Alejandra: Bueno, es muy diferente lo que te pasó y a propósito creo que para ti fue hasta beneficioso, ¿no? Para mí, esta situación solo me ha traído desgracias. Pero cuéntame por favor por qué crees que fue Sandra la culpable de mi rollo.

Julio: Si, veo que estás muy alterada y te entiendo. Pues es que volviendo a lo mío, al fin supe que quien tomó esa foto fue Sandra y la verdad no sé con qué intención lo hizo, porque como dices tú, al final eso terminó dándome una vitrina que coincidió con una obra de teatro que estoy dirigiendo y he tenido mucho público. Pero es que Sandra es complicada. Es obvio que sus intenciones eran otras cuando filtró esa foto.

Alejandra: Ok. ¿Y eso cómo se conecta con mi video? ¿Cómo hizo Sandra para acceder a él?

Julio: Pues yo estuve una noche en la casa de Carlos y se armó una fiesta hasta rara y varios tuvieron la cámara.

Alejandra: Varios, ¿quiénes? ¿Es que Sandra estaba allá?

Julio: No. Pero yo me fui relativamente temprano y me dijeron que éste que es super amigo de ella, Pipe, estuvo manipulando mucho esa cámara. Pipe y Sandra han estado metidos en varios líos con el material de otros directores y colegas. Obviamente no ese tipo de material, pero me acuerdo que una vez un amigo nuestro tuvo un problema grande porque se le había perdido un disco duro donde tenía imágenes, tomas, hasta libretos de historias. Y fue en un contexto muy parecido; en una rumba donde todo el mundo estaba re loco, y qué casualidad, estaban Pipe y Sandra.

Te repito que yo sé que ustedes son muy amigas, pero tu no has trabajado con ella. En el trabajo Sandrita no sé por qué se pone medio rara. Es muy competitiva, y cuando encuentra la oportunidad trata de subestimar o deslegitimar el trabajo de los demás.

Alejandra: Espera, ¿y tú cómo sabes que el video estaba en la cámara? Porque hasta donde Carlos me había dicho, estaba en el computador.

Julio: ¡Ah! Bueno, eso sí ni idea. Cuando el video empezó a rodar por todas partes, la gente siempre dijo que estaba en la cámara de Carlos.

Alejandra: ¡Uy! Julito, como muy reforzada esa historia. De todos modos, te digo algo: yo ya hice la respectiva denuncia en la Fiscalía y estoy asesorada de una abogada excelente. Con esto nos vamos hasta el fondo, así que por un lado, yo voy saber quién putas fue que publicó ese video para denunciarlo penalmente, y por otro lado, y ahí te pido el favor de que tú riegues la voz entre todos esos que te han contado dónde estaba el video, que el que continúe difundiéndolo está cometiendo un delito así que lleva también.

Julio: ¡Ah, no, pero claro! Haces muy bien. ¿Ya te fuiste de fiscalía y todo? No, es que toca porque a la gente hay que pararla.

Alejandra: Exacto. A mí me jodieron la vida, no veo la hora de hacerle pagar al que me la jodió. Y te digo algo: no sigas diciendo que Sandra fue la que difundió ese video; tus sospechas no son concluyentes. Son eso, sospechas y están muy reforzadas.

Julio: Ok Aleja, yo solo quiero tratar de ayudarte porque sé que no la debes estar pasando bien.

Alejandra: Te lo agradezco y ahora te dejo porque estoy bastante ocupada. Que estés bien.

Julio: Chao querida. Lo que necesites acá estoy.

Alejandra quedó muy incómoda con esa conversación y aumentan sus sospechas por Julio. En el fondo, ella siente que no tiene por qué dudar de Sandra. Su amistad ha sido muy sólida, se conocen desde hace muchos años y siempre la ha considerado una mujer vertical con todo y las diferencias que puedan existir entre las dos. Es una mujer guerrera, que le ha tocado muy duro, pero que se ha trabajado cada peso que se ha ganado con mucha honestidad a pesar de su origen humilde. Puede que tenga un carácter fuerte, que a veces hasta se haya salido de sus cabales, pero jamás ha dado señales de ser una mujer desleal. Por el otro lado, Julio no le dijo nada que ella no supiera. Si, fue Sandra la que tomó esa foto, pero fue porque ella misma se lo pidió, así que sabe cuáles fueron sus intenciones cuando lo hizo. En fin, cuando pensaba de manera más profunda en esto, se sentía como tratando de desenmarañar un chismorreo de adolescentes y le parecía increíble porque en cambio estaba lidiando con gente incluso mayor que ella.

En medio de sus pensamientos se quedó dormida. Al otro día cuando se despertó, se fue para el cuarto de su mamá a saludarla y la encontró con una expresión distinta. Le preguntó cómo se sentía y ella le dijo que parecía que no iba a ser un buen día, que estaba con mucho dolor, pero que estaba preparada para afrontarlo. Alejandra le dijo que le llevaba el desayuno, su mamá le dijo que no tenía ganas de comer nada, le dio sus medicinas y se quedó con ella un rato hasta que se durmió por los efectos de los analgésicos. 

Para Alejandra empezaba a ser muy claro que su mamá estaba empeorando rápidamente y esa consciencia le explotó una fuerza interior que ni ella sabía que podía tener. Pensó que debía ponerse en pie, proporcionarle a su mamá unos días medianamente tranquilos en los que la viera decidida, con ganas de seguir adelante y demostrarle que sí iba a ser capaz con todo, como ella misma se lo había recordado.

Así que cambió su chip mental, se propuso estar mejor que el día anterior; para eso puso música. No podía evitar pensar en Carlos y se le vino a la mente esa cantante que a él también le encantaba y buscó en sus listas una canción que le resultaba perfecta para levantar un poco el ánimo: ‘The time is now’ de Moloko. Sabía que la persona que más amaba en el mundo había iniciado un camino sin regreso, pero era justamente por ella, por ese amor, por esa entrega que tenía que recomponerse, pelear por lo que quería hacer con su vida. Pensó que talvez había llegado el momento de dar un giro grande y reiniciarse. Construir un mundo en donde se sintiera viva, auténtica y que respondiera a lo que tenía dentro de ella. Se descubrió cuestionándose si a lo mejor hasta ese momento había vivido tratando de cumplir con unos lineamientos y con las expectativas de los demás, si en realidad eso que había hecho hasta ese instante era lo que de forma legítima la hacía vibrar y pensó: ¿Por qué no voltear a mirar para otro lado?

Empezó a buscar por internet algunas opciones para hacer algún master fuera del país. Mientras pasaba la mañana y leía opciones en Londres, Madrid y Paris, le llega un mensaje a su celular.

Mensaje de Sandra: 

Hola, mamacita. ¿Cómo vas? Mk, ¿leíste el comunicado que publicó Carlos en su perfil de Instagram?